Robo en colegio de parroquia de Riobamba
Se registró el robo en un colegio de la parroquia Punín del cantón Riobamba. Se llevaron monitores e impresoras de la Dirección

Hubo un robo en un colegio de una parroquia de Riobamba.
Nadie se salva de la delincuencia en la provincia de Chimborazo, ni los ‘Templos del Saber’.
El lunes 31 de marzo de 2025 dio cuenta de un robo en la Unidad Educativa ‘Miguel Ángel León Pontón’.
Robo en la zona rural de Riobamba

En esa ocasión el perjuicio comprendió el robo de 5 equipos celulares pertenecientes a la institución académica, en su Sede II.
Más, esta ocasión participo que otro centro educativo fue ‘visitado’ por ‘amigos de lo ajeno’.
El viernes 16 de mayo de 2025, a las 13:18, efectivos uniformados del Circuito ‘San Luis’ se trasladaron hasta la comunidad Santa Bárbara, donde funciona la Unidad Educativa ‘Benito Juárez’.
Esta casona del saber ofrece:
- Educación Inicial
- Educación Básica
- Bachillerato
De jurisdicción Intercultural, funciona en el sector rural, beneficiando a estudiantes de las parroquias Punín y San Luis, del cantón Riobamba.
Colegio de parroquia víctima de los ‘enemigos de la sociedad’

¿La razón? El presunto cometimiento de un delito contra la propiedad: robo.
En el lugar, los ‘Caballeros de la Paz’ se entrevistaron con la rectora del establecimiento formativo, quien les comunicó la novedad.
Así, les indicó que al arribar a las 06:45, para iniciar sus actividades laborales, observó que el aula de Octavo de Educación General Básica presentaba roto el vidrio, lo que le dio mala espina.
Al ingresar a su oficina, la de la Dirección, notó que faltaban varios bienes que utiliza en su jornada diaria.
Y se percató que no estaban, entre otros:
- 2 monitores de marca HP
- 2 impresoras
Asimismo, señaló que las cámaras de vídeovigilancia no funcionaban ese instante.
Los efectivos de la Policía Nacional acantonada en a Subzona ‘Chimborazo N°6’ empezaron a recabar información, vestigios e indicios que ayuden a encaminar la investigación.
También señalaron que al manipular la escena del delito no se pudo coordinar con Criminalística el tomar las huellas dactilares.
Pese a ello, se realizó el debido procedimiento, y habría pistas que podrían dar con el paradero de los ‘enemigos de la educación’ de niños y adolescentes.