Padre vivió una odisea para retirar el cuerpo de su hijo
Padre vivió una odisea en Cuenca para retirar el cuerpo de su hijo. El joven fue trasladado desde Sucúa con fiebre amarilla.

Padre vivió una verdadera odisea para retirar el cuerpo de su hijo. El joven murió por fiebre Amarilla.
En anteriores días, se confirmó el primer caso y a la vez, el primer fallecimiento por Fiebre Amarilla en Morona Santiago, precisamente en el cantón Sucúa.
El hecho sucedió en el Hospital José Carrasco en Cuenca, lugar a donde fue trasladado después de presentar complicaciones en su estado de salud.
Fue el lunes 28 de abril de 2025 al mediodía cuando se lo trasladó desde Sucúa, ingresó aproximadamente a las 17H00, y alrededor de las 21H00 se conoció de su muerte.
Retirar su cuerpo fue un verdadero sufrimiento para sus familiares. Así lo confirmó para medios de la localidad un amiga de la familia, quien ayudó en los trámites:
“El joven vino solo con su papá, son de nacionalidad shuar, estaban completamente solos. Cuando falleció, los doctores nos dijeron que no nos van a emitir el certificado para sacar el cuerpo, ya que permaneció pocas horas en el hospital; mas bien, debería ser emitido desde el Hospital Básico de Sucúa”
Al posible cuadro de fiebre amarilla se sumaron las dudas de los médicos sobre algunos golpes en el cuerpo del joven:
“por esa razón llamaron a la Policía, y a traves de ellos, se llamó al personal de la Dinapen”
Los golpes se debían a una caída de una motocicleta sufrida días antes.
La mujer indicó que en ese momento llegaron miembros de la Policía Nacional y personal de la DINASED, quienes hablarían directamente al Hospital de Sucúa para que emitan el certificado de la muerte del joven.
Cuando se acercaron al día siguiente, no había información al respecto, nadie conocía del tema. Silencio absoluto.
“Acudimos con el señor al Segundo Piso del IESS, nos atendieron directivos del hospital, supongo. Llamaron a Sucúa, donde indicaron que no pueden emitir un certificado porque el joven falleció en Cuenca”.
Ese mismo día tomaron las muestra para fiebre amarilla, luego de ello las enviaron a Guayaquil para la confirmación del caso. La respuesta llegaría en cuatro días.
El cuerpo seguía en el Hospital, y por la enfermedad, le habían explicado a la ciudadana, no podían ingresarlo al Centro Forense.
El padre no tenía dinero y no sabía qué hacer.
Tras la confirmación; y al tercer día de su fallecimiento, el cadáver se entregó a sus familiares. Al fin su padre pudo llevarlo para darle sepultura en su comunidad.