Médicos ecuatorianos señalados por fraude en examen
Médicos ecuatorianos fueron suspendidos tras sospechas de fraude académico en Argentina, desatando un escándalo por el examen de residencia.

Decenas de estudiantes de medicina, en su mayoría ecuatorianos, enfrentan un fraude académico sin precedentes en Argentina.
Las autoridades investigan una presunta trampa en el examen de residencias médicas que ha generado controversia y preocupación en ambos países.
¿Qué ocurrió con los médicos ecuatorianos en Argentina?
El escándalo se centra en el examen de residencia médica, organizado por el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Según medios locales y autoridades argentinas, se detectaron posibles irregularidades en los resultados del examen.
Lo que llevó a la suspensión temporal de más de 30 postulantes, principalmente médicos extranjeros de origen ecuatoriano.
Los aspirantes involucrados son graduados de universidades argentinas, especialmente de instituciones como la Universidad Nacional de Córdoba y la Universidad Nacional de Rosario.
Muchos de ellos habían logrado puntajes excepcionalmente altos, lo que encendió las alertas en el comité evaluador.
Investigación por fraude académico en exámenes médicos
El Ministerio de Salud de CABA y la Fiscalía General de Argentina iniciaron una investigación formal para determinar si existió filtración o acceso indebido a los contenidos del examen de residencia.
Hasta el momento, no se han presentado cargos penales, pero los implicados fueron notificados de manera preventiva
También se les ha suspendido provisionalmente su participación en el proceso de asignación de plazas.
Los exámenes fueron anulados para los postulantes señalados, lo que generó una ola de reacciones tanto en Argentina como en Ecuador.
Organizaciones estudiantiles, asociaciones médicas y familiares de los afectados han solicitado transparencia y debido proceso en la investigación.
Respuesta de los estudiantes ecuatorianos acusados
Varios de los médicos ecuatorianos involucrados han defendido su integridad académica, alegando que no han cometido ningún acto ilícito y que sus calificaciones reflejan años de estudio y preparación.
Además, aseguran ser víctimas de discriminación y estigmatización por su nacionalidad.
En medio de un contexto donde la presencia de profesionales extranjeros en el sistema de salud argentino ha sido creciente y visible.