Irán atacó Israel con misiles balísticos que superaron la Cúpula de Hierro y alcanzaron zonas residenciales, dejando varios heridos
La tensión en Medio Oriente escala dramáticamente tras el ataque iraní en represalia a un bombardeo israelí contra instalaciones nucleares en Teherán.
Irán lanzó una serie de misiles balísticos que, según fuentes oficiales y videos difundidos en redes sociales, lograron superar el sistema antimisiles conocido como Cúpula de Hierro, impactando en zonas urbanas como Tel Aviv.
Irán ataca con misiles zonas pobladas de Israel
A través de su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter), las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán confirmaron su autoría del ataque con un mensaje contundente: «Hemos llegado».
Este bombardeo responde, según autoridades iraníes, a un ataque previo atribuido a Israel contra una central nuclear en Teherán, donde murieron altos mandos militares y científicos nucleares del régimen iraní.
Videos muestran impacto en zonas civiles
Imágenes y grabaciones compartidas por ciudadanos israelíes muestran explosiones en zonas residenciales y familias corriendo a refugiarse en búnkeres.
Una familia ecuatoriana residente en Rishon Lezion, al sur de Tel Aviv, grabó el momento exacto en que varios misiles surcaban el cielo antes de que se escucharan fuertes detonaciones.
«Millones de israelíes corrieron a refugiarse mientras los misiles balísticos atacaban importantes centros de población», publicó el Gobierno de Israel en X.
Estados Unidos brinda apoyo a Israel
Fuentes oficiales han confirmado que Estados Unidos ha activado su respaldo militar a Israel, desplegando apoyo defensivo y logístico para contener la ofensiva iraní.
La situación se mantiene extremadamente volátil, y los gobiernos de la región —incluidos Egipto, Jordania y Arabia Saudita— han emitido llamados a la contención inmediata del conflicto.
La ofensiva iraní es una respuesta directa al ataque israelí del pasado 10 de junio sobre una central nuclear en las afueras de Teherán.
El bombardeo, aún no reconocido formalmente por Israel, provocó la muerte de varios altos mandos militares del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
