Simiátug trabaja con justicia indígena y obras para la comunidad
Entrevista al teniente político de Simiátug sobre su trabajo con la justicia indígena, la gestión de obras y el compromiso con su comunidad

En esta entrevista, el teniente político César Martínez de Simiátug nos habla sobre su labor en la parroquia, la coordinación con la justicia indígena y el avance de las obras viales para mejorar la calidad de vida de la comunidad.
César Martínez cumple un año y tres meses como teniente político de la parroquia Simiátug, en el cantón Guaranda.
En esta entrevista, destaca la relación con la comunidad
¿Cuánto tiempo lleva usted como teniente político de Simiátug y cómo valora su experiencia?
Ya voy un año y tres meses en funciones. Para mí ha sido un gran compromiso y una enorme responsabilidad.
He trabajado sin horario, sin descanso, porque ser teniente político no es un cargo cualquiera, uno está disponible siempre.
Ha sido una experiencia enriquecedora, porque mi objetivo ha sido siempre servir a mi gente.
¿Cuál ha sido su mayor fortaleza para ganarse la confianza de la comunidad?
Conozco bien la parroquia. Antes fui dirigente de base y secretario del GAD parroquial. Entonces la gente me identifica. Lo más importante es hablar con la verdad.
Si se puede ayudar, se ayuda. Si no, buscamos soluciones juntos. Esa sinceridad ha hecho que me acepten.
¿Qué tipo de operativos o actividades ha realizado desde la tenencia política?
Hemos hecho operativos en las comunidades, control de licor, prevención de violencia intrafamiliar, hemos trabajado con la Policía Nacional, el Consejo Cantonal de Protección de Derechos y también con los presidentes de las comunidades.
Hemos logrado mejorar mucho en temas de seguridad
¿Cómo se maneja la coordinación con la justicia indígena en su parroquia?
Con el sistema de justicia indígena trabajamos de la mano, con respeto. Si hay casos que pueden resolverse en comunidad, se los trata allá.
Si no se puede, lo derivamos a la autoridad competente. Yo no interfiero, más bien acompaño.
Los castigos comunitarios que aplican, como baños de agua fría o trabajos, han sido efectivos. Eso ha reducido bastante los problemas de violencia
¿Qué obras o gestiones ha logrado articular en el área vial y de mantenimiento?
Gracias a la coordinación con la Prefectura, el GAD parroquial y las comunidades, hemos trabajado en varias vías.
Por ejemplo, hacia Shulug, El Corazón, Huantún, La Escondida.
La gente ayuda con la limpieza de cunetas, alimentación para el operador o combustible. Así logramos que la maquinaria llegue donde antes no podía.
¿Qué limitaciones ha encontrado en su labor como autoridad del Ejecutivo?
La principal limitación es que no contamos con presupuesto propio. Desde la tenencia no manejamos recursos económicos, pero gestionamos.
Lo importante es la voluntad. Cuando uno quiere trabajar, busca soluciones y se acerca a otras instituciones
¿Qué reacción ha tenido la ciudadanía ante su forma de trabajar?
La aceptación ha sido buena. Estoy en constante diálogo con los dirigentes, visito las comunidades, y eso se valora.
La gente ve que uno no está solo en la oficina, sino en el territorio, viendo los problemas reales.
¿Cuáles son sus planes a futuro como teniente político?
Seguir trabajando junto a la gente, sin mirar banderas políticas.
Queremos mejorar más vías, fortalecer la casa comunal, los espacios deportivos y apoyar a las comunidades en todo lo que esté a nuestro alcance.
Mientras esté en este cargo, mi prioridad será siempre el bienestar de Simiátug.
Conclusión de nuestra entrevista
La gestión de César Martínez como teniente político de Simiátug se ha caracterizado por la cercanía con la comunidad, la coordinación con instituciones del Estado y el respeto a las decisiones de la justicia indígena.
A pesar de las limitaciones presupuestarias, su labor ha estado marcada por la voluntad de servicio y la articulación de esfuerzos para atender las necesidades más urgentes de la parroquia.
Con un enfoque de trabajo honesto y sin horarios, César Martínez reafirma que su compromiso es con el bienestar colectivo de su gente y que su prioridad seguirá siendo estar presente, en escuchar y actuar desde el territorio.