Ejército decomisa teléfonos en cárcel de Riobamba durante operativo militar ejecutado en Navidad para reforzar seguridad y prevenir delitos internos.
El Ejército decomisa teléfonos en cárcel de Riobamba como resultado de una operación militar ejecutada la madrugada del 24 de diciembre, en plena celebración de Navidad.
La intervención fue liderada por la Brigada de Caballería Blindada, con el objetivo de reforzar la seguridad interna del centro penitenciario y prevenir actividades ilícitas que atenten contra el orden y la paz ciudadana.
A pesar de la fecha festiva, las Fuerzas Armadas mantuvieron activos los controles estratégicos dentro de la cárcel, demostrando su compromiso permanente con la seguridad del sistema penitenciario ecuatoriano.
Operativo militar permitió decomisar objetos prohibidos
Durante los registros exhaustivos en diferentes áreas del centro de privación de libertad, el personal militar logró identificar y decomisar varios objetos prohibidos, entre ellos:
- Cinco teléfonos celulares
- Cinco chips para dispositivos móviles
- Un congelador de gran tamaño
- Un parlante
- Otros artículos no autorizados
El hallazgo de artefactos tecnológicos y electrodomésticos de gran dimensión genera preocupación.
Ya que evidencia fallas en los controles internos y posibles intentos de mantener comunicación ilegal desde el interior del penal.
Las autoridades militares señalaron que el ingreso de estos objetos representa un riesgo para la seguridad penitenciaria.
Ya que los teléfonos celulares suelen ser utilizados para coordinar extorsiones, amenazas y delitos organizados.
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Ejército refuerza controles en centros penitenciarios
Tras el operativo, la Brigada de Caballería Blindada reiteró que el Ejército decomisa teléfonos en cárcel de Riobamba como parte de una estrategia integral para combatir la criminalidad desde los centros de reclusión.
Además, se anunció que las operaciones militares se intensificarán y se mantendrán de forma permanente.
Estas acciones buscan recuperar el control del Estado en los centros penitenciarios, fortalecer la seguridad interna y evitar que las cárceles continúen siendo utilizadas como centros de planificación delictiva.
El Ejército ecuatoriano reafirmó su compromiso de trabajar de manera coordinada con otras instituciones del Estado para garantizar el orden, la seguridad ciudadana y la paz social.
Especialmente en fechas sensibles como Navidad, donde se incrementan los riesgos de incidentes.
