Aún sin saber los resultados oficiales sobre la consulta popular, podría creer que las bases militares y la constituyente o ganó el No o el Sí lo hizo con un margen muy corto, lo que demuestra un desgaste del Gobierno y una derrota evidente a sus intereses inmediatos y más fuertes: la constituyente era necesaria para que el gobierno cambie el modelo a su favor y las bases militares lo eran para sus acuerdos con Estados Unidos, si ninguna de esas preguntas pasan ponen en jaque al proyecto de gobierno sin lugar a dudas.
Si nuevamente la ciudadanía le dice en una consulta al gobierno que no le va a decir que sí a todo o firmarle un cheque blanco sin saber para qué servirá es una muestra de una ciudadanía distinta, capaz de discernir por fuera de lógicas encasilladas en ismos que no abonan a un futuro mejor, hay una nueva generación que está usando la inteligencia artificial, los fact check y la información de forma más sensata y con criterio suficiente para decidir sobre la base de la pregunta en concreto.
El gobierno perdió la consulta, así ganara el sí en la preguntas B y C sobre el sistema de partidos, con la financiación pública y la reducción de asambleístas, esta derrota debería significar un cambio de estilo total en la forma de gobernar del presidente Noboa, una que vuelva a los caminos democráticos, que evite los excesos y el clientelismo que fueron males que se criticaron a Correa y que con el tiempo suficiente significó su salida del poder.
El país necesita reformar el sistema orgánico de la Constitución de 2008, claro que es necesario pero, no sin perder los avances que tuvo en materia de protección de derechos la actual Constitución, una vía legítima para cambiar eso, con menos incertidumbres y más certezas, es la reforma parcial que luego del trabajo de redacción que hiciera la asamblea nacional nos permitiría llevar a referéndum un proyecto de texto que se puede debatir con más seriedad y sin firmar cheques en blanco, gobernar con visión de futuro y sin inmediatismo es la necesidad más urgente para sacar el país adelante.
