Pía Guijarro propietaria del Palacio del Disfraz, es una de las madrinas del Mundialito que llevó alegría a Leonardo Aguirre, jugador de la LDU Riobamba.

Los padrinos y madrinas del Mundialito Guambras con Fe iniciaron con la entrega de los balones de Kendry Paez a sus ahijados, un gesto que busca motivar a los niños en su camino deportivo y emocional.
Entre ellos, destaca la participación de Pía Guijarro propietaria del Palacio del Disfraz, una de las madrinas que llevó alegría al pequeño Leonardo Aguirre, jugador de la escuela de fútbol Liga de Quito.
La entrega no solo fue un acto simbólico, sino un momento cargado de recuerdos para Pía, quien compartió su propia historia con Diario La Prensa: hace 20 años, ella representó al Mundialito como reina, una experiencia que describe como “hermosa” y que marcó su vida de manera especial.
Hoy, dos décadas después, vuelve al mismo escenario, pero esta vez desde un rol distinto: el de madrina, acompañando a un niño en su crecimiento deportivo.
Pía destaca la importancia del deporte en la vida de los más pequeños y lo expresa de manera contundente:
“Es muy importante apoyar a los niños en el deporte porque para empezar es salud, es vida y les ayuda mucho a distraerse y a canalizar sus energías. Les ayuda a tener un cuerpo sano, una mente sana y también a desarrollarse en otros ámbitos de mejor manera.”
Su mensaje resalta el verdadero impacto que tiene el deporte en la salud física, emocional y social de los niños, recordando que cada entrenamiento es una oportunidad para aprender, crecer y construir hábitos que los acompañarán toda la vida.
Este año los niños también tuvieron la oportunidad de participar en el programa de salud mental liderado por la Unach.
Invitamos a quienes deseen formar parte de esta iniciativa a unirse como padrinos para apoyar a los más de 30 niños que entrenan día a día, cultivando disciplina, pasión y sueños a través del deporte.

