Bolívar: tradición en la elaboración de juegos pirotécnicos
Bolívar enciende su identidad cultural a través de los juegos pirotécnicos en San José de Chimbo, una tradición que ilumina fiestas

Identidad, fuego y arte. Así enciende su esencia Bolívar, donde los juegos pirotécnicos no solo celebran, sino narran la historia de un pueblo que vive entre luces y tradición.
San José de Chimbo, cantón de la provincia de Bolívar, es conocido en Ecuador como “la ciudad de los juegos pirotécnicos”. Esta tradición, con más de 30 años de historia, se transmite de generación en generación, iluminando los cielos con espectáculos llenos de color y emoción.
La pirotecnia es parte de la identidad cultural de Chimbo. Muchos artesanos, reconocidos a nivel provincial y nacional, aprendieron el oficio desde niños por herencia familiar.
La chispa que une generaciones a través del fuego
Entre ellos destacan Mateo Ruales, artesano con más de 25 años dedicado a la elaboración de “castillos” y “carruseles”, y Elías Salazar, maestro en la fabricación de mechas y experto en la mezcla artesanal de pólvora, ambos referentes de la tradición pirotécnica chimbeña.
Aunque es una actividad peligrosa, la pasión y el conocimiento han hecho que sus trabajos sean muy apreciados en fiestas y celebraciones, especialmente nocturnas.
El proceso artesanal incluye desde cortar carrizo y construir estructuras hasta la elaboración de pólvora explosiva.
Los materiales como clorato, aluminio (blanco o negro), antimonio y azufre se adquieren en Cuenca por ser más económicos.
El carrizo, base de los “voladores” y estructuras, se compra en San Lorenzo y Santiago.
Uno de los procesos más delicados es la fabricación de la mecha. Se usan tres hebras de hilo de 50 metros, con 200 vueltas de torsión exactas.
La pólvora, mezclada con resina y enfriada con hielo, se adhiere al hilo antes de secarse al sol.
Bolívar brilla con castillos y carruseles de fuego
Las estructuras más representativas son los “castillos”, torres de hasta cuatro niveles que culminan con la imagen del santo patrono.
También destaca el “carrusel”, compuesto por figuras como aviones o caballos, que giran gracias a cohetes de pólvora.
San José de Chimbo no solo ofrece un espectáculo visual, sino que refleja el ingenio y la tradición viva de una comunidad que ha hecho de la pólvora una forma de expresión cultural.