En un hecho escalofriante, un adolescente asesina a su padre y hermana, revelando detalles perturbadores del hecho y violencia.
En un suceso que ha conmocionado a la ciudad de Bogota, un adolescente asesina a su padre y hermana tras un ataque brutal con 193 puñaladas.
Según declaraciones del joven, la agresión fue resultado de una mezcla de conflicto familiar y un descontrol emocional que terminó en tragedia.
El menor de 14 años relató que, tras una discusión entre sus padres, tomó un cuchillo y subió a la habitación donde se encontraban su padre y su hermana.
“Pensé que le iba a pegar con lo que fuera, pero mientras subía con el cuchillo, pensé en apuñalarlo”, confesó ante las autoridades.
La niña de siete años intentó proteger a su padre y también fue atacada, recibiendo 75 puñaladas según el informe de Medicina Legal.
Detalles del crimen y confesión del adolescente
El padre del joven, mayor del Ejército Nacional, sufrió 118 puñaladas antes de perder la vida.
La violencia y brutalidad del ataque han generado un profundo impacto entre vecinos y familiares, quienes aún intentan comprender cómo un menor pudo cometer un crimen de tal magnitud.
Tras el asesinato, el adolescente intentó agredir también a su madre, quien logró escapar y sobrevivir.
La mujer ha recibido atención psicológica y se encuentra bajo protección mientras las investigaciones continúan.
Expertos en psicología y criminología señalan que los casos de violencia intrafamiliar, especialmente aquellos protagonizados por menores, requieren una intervención temprana para evitar tragedias de este tipo.
Confesión escalofriante del adolescente sobre el crimen
La noche del crimen, el adolescente relató que
“Cuando bajaba con el arma, estaba pensando en apuñalarlo”
Utilizó un cuchillo que encontró en su casa mientras planeaba cómo hacer que su padre no sobreviviera.
“En clase de biología y anatomía siempre nos decían que las partes más delicadas del ser humano eran pecho y cerebro”, explicó, asegurando que ya tenía claro dónde impactar para causar daño grave.
Esa noche su padre lo regañó mientras su madre estaba fuera de la casa y su hermana en otro cuarto.
“Él estaba mirando el celular para unas cosas del trabajo, ahí lo apuñalé en el corazón”, confesó, y luego se retiró a su habitación.
Minutos después decidió volver a la habitación donde su padre yacía en el piso; aunque sentía que había cometido un error, afirmó que la rabia por los castigos que recibía lo llevó a descontrolarse y cometer el ataque.
Repercusiones y debate sobre violencia intrafamiliar
El caso ha generado un debate nacional sobre la violencia dentro del hogar y la importancia de la salud mental en adolescentes.
Organizaciones de protección infantil han llamado a reforzar programas de apoyo familiar y a prestar atención a signos de riesgo en menores.
“La confesión del adolescente refleja no solo un problema individual, sino también fallas en el entorno familiar y social que pudieron haberse prevenido”, afirma un especialista en violencia intrafamiliar.
Investigación y proceso legal
Las autoridades continúan con la investigación y ya se han tomado declaraciones de familiares y vecinos.
El adolescente se encuentra bajo custodia de las autoridades y se evalúa su estado psicológico, mientras los procesos legales siguen su curso.
El caso, además, ha despertado interés mediático y ha generado numerosas reacciones en redes sociales, donde ciudadanos expresan conmoción y preocupación por la seguridad y bienestar de los menores en contextos familiares conflictivos.
