Adam, es un anticonceptivo masculino sin cirugía definitiva ni hormonas y además es reversible en la planificación familiar
Por primera vez, un anticonceptivo masculino «Adam» no hormonal y reversible ha mostrado resultados prometedores en humanos.
Es un implante desarrollado por la empresa Contraline, que avanza hacia su segunda fase de pruebas clínicas y ofrece una alternativa innovadora a la vasectomía y al preservativo.
Este nuevo método consiste en un hidrogel biodegradable que se inserta con anestesia local en los conductos deferentes, bloqueando el paso de los espermatozoides.
El implante se descompone de forma natural en el cuerpo, restaurando la fertilidad sin necesidad de cirugía.
Kevin Eisenfrats, director de Contraline, aseguró:
“Es como un DIU masculino. Buscamos una solución duradera pero no permanente, con reversión bajo demanda”.
La intervención dura apenas 10 minutos y ya ha demostrado bloquear el esperma por al menos 24 meses sin efectos adversos graves.
Una respuesta a años de inequidad anticonceptiva
Hasta hoy, las opciones masculinas se limitaban al preservativo o la vasectomía.
Frente a los nueve métodos disponibles para mujeres, esta desproporción ha sido señalada por expertos como una deuda científica y social.
La fase 1 del ensayo clínico de Adam, realizada en EE.UU., incluyó a 25 participantes.
Dos de ellos ya cumplieron los dos años de seguimiento, sin presencia de espermatozoides. La fase 2 se iniciará en Australia a finales de 2025, con más de 30 voluntarios.
Este avance llega mientras otros métodos como la píldora YCT-529 también no hormonal están siendo evaluados.
El profesor Richard Anderson, de la Universidad de Edimburgo, afirmó
“Es impresionante que funcione, pero la reversibilidad aún está por demostrar”.
Aunque aún faltan estudios a largo plazo, Adam representa una esperanza real para que la anticoncepción deje de ser una carga casi exclusiva de las mujeres.
