En California, un brutal caso conmociona, un Hombre asesina a delincuente sexual de 71 años y confiesa haber disfrutado del crimen.
La comunidad de Fremont, California, está conmocionada tras conocerse un perturbador caso que combina justicia por mano propia, violencia y un trasfondo legal complejo.
Según documentos judiciales, Hombre asesina a delincuente sexual de 71 años en circunstancias que han generado un intenso debate social y mediático.
El presunto responsable, identificado como Varun Suresh, de 29 años, no solo confesó el crimen, sino que declaró que matar “fue realmente divertido”.
Cómo se planificó el asesinato
De acuerdo con las investigaciones, el homicidio ocurrió el 18 de septiembre, cuando Suresh habría utilizado un registro público de delincuentes sexuales para localizar a la víctima.
Tras revisar varias direcciones, eligió específicamente a David Brimmer, de 71 años, por considerarlo un objetivo “fácil de matar” debido a su edad avanzada.
El acusado viajó hasta el vecindario de Brimmer, se presentó como contador para no levantar sospechas y comenzó a tocar puertas en busca de confirmar la residencia.
Una vez que llegó a la casa correcta, inició un plan macabro que culminaría con un asesinato brutal.
Los últimos minutos de la víctima
Según la fiscalía, cuando Brimmer abrió la puerta, Suresh lo atacó con un cuchillo.
El hombre logró escapar momentáneamente hacia la vivienda de un vecino, pero fue perseguido por el agresor.
Tras ser acorralado en la cocina de su casa, recibió múltiples puñaladas.
Finalmente, la víctima colapsó en el césped de su hogar y fue declarada muerta en la escena.
Lo más escalofriante es que Suresh permaneció en el lugar y habló directamente con la policía, expresando frialdad absoluta ante el crimen.
Las declaraciones del agresor
Lo que más sorprende a la opinión pública son las propias palabras del acusado.
Según documentos judiciales, Suresh confesó que no sentía remordimiento, asegurando que asesinar a Brimmer “fue realmente divertido”.
Además, justificó sus acciones alegando que “los pedófilos merecen morir” y que esperaba obtener apoyo social por lo ocurrido.
Estas declaraciones han levantado aún más la polémica, pues si bien la víctima tenía antecedentes, el asesinato constituye un crimen con todas sus agravantes.
El perfil de la víctima
Brimmer no era un desconocido para las autoridades.
En 1992 fue acusado de tres cargos de conducta lasciva con menores de entre 9 y 15 años, cuando trabajaba como pastor en la iglesia Jubilee Christian Center.
Por estos antecedentes, su nombre figuraba en el registro público de delincuentes sexuales en California.
Aunque había cumplido con los requisitos legales, su pasado terminó marcando el destino que lo convirtió en objetivo de un ataque mortal.
Los cargos contra Suresh
El fiscal del condado de Alameda confirmó que Suresh enfrenta cargos de asesinato, allanamiento de morada y uso de arma para causar gran daño corporal.
Asimismo, el tribunal ordenó que se le practiquen evaluaciones psiquiátricas para determinar su estado mental al momento del crimen.
La defensa aún no ha emitido un pronunciamiento público, pero el caso promete extenderse en un proceso judicial que podría marcar precedentes.
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Debate social y repercusiones
Este asesinato reabre una discusión sensible: ¿es válido justificar un crimen cuando la víctima tiene antecedentes de delitos sexuales?
Para algunos sectores de la población, Suresh actuó como un “justiciero”.
Sin embargo, para expertos legales y defensores de derechos humanos, el hecho constituye un peligroso precedente que podría incentivar más actos de violencia contra personas registradas.
El dilema ético y legal pone en tensión la línea entre el deseo de justicia social y el respeto al estado de derecho.
